Loriga

Seia

Ícone escapes

Escapadas

Ícone nature

Naturaleza

Ícone flavors

Sabores

Acerca de
Loriga

Serpenteando por las montañas, llegamos a un pueblo a 770 metros de altitud, en un valle glaciar rodeado de montañas pintadas de blanco. Alrededor, todo es naturaleza en estado puro: los arroyos corren fríos sobre el suelo de piedra, descansando en cascadas y lagos naturales; las laderas -trabajadas minuciosamente en terrazas- albergan campos de cultivo, aquí y allá salpicados de casitas de granito, puentes y rebaños. Es la "Suiza portuguesa". Sí, el paisaje natural de Loriga nos transporta a los Alpes, que es lo que le ha valido el sobrenombre. Pero todo lo demás es muy portugués.

Los orígenes de la ciudad -documentados en el vasto patrimonio local (puente y calzadas romanas, iglesia y picota medievales, entre otros)- así lo demuestran. Loriga tiene más de 2.600 años de historia, de pueblo umbilicalmente ligado a la agricultura y al pastoreo. Sede del municipio desde el siglo XII hasta 1855, fue en su día una de las ciudades más industrializadas de Beira Interior, sede de decenas de fábricas de lana (oficio al que se dedicaba la población local desde el siglo XV, aunque de forma artesanal).

Con el cierre de las fábricas, Loriga perdió la importancia industrial de antaño, pero la identidad local permanece e invita a explorar la región. Los rebaños siguen formando parte del paisaje y, el día de San Martín, los pastores roban sus carracas y las pasean ruidosamente por las calles del pueblo: son las tradicionales "Chocalhadas", que, según cuenta la leyenda, ahuyentan los "males" del ganado. En la mesa, no faltan el cabrito, los embutidos y el queso, pero sus iconos gastronómicos son la broa y el bolo negro, sabores únicos en la región. La broa aún utiliza harina molida en molinos de agua para su elaboración, y el bolo negro, con una forma parecida a la de un pastel inglés (quizás por influencias internacionales relacionadas con la industria textil), se dice que es un "pastel portugués con acento inglés". No cabe duda: esta Suiza es tan portuguesa como se puede ser.

Ver no mapa

ver mapa